El tribunal colegiado integrado por las juezas Carina Álvarez, Florencia Martini y el juez Lucas Yancarelli, determinó por unanimidad que no hay pruebas suficientes para condenar a dos policías acusados de vejaciones y de lesiones graves y leves. Las víctimas eran tres personas que habían sido detenidas en flagrancia, cuando salían de perpetrar el robo a una vivienda en el barrio Altos del Limay en marzo de 2019.
El tribunal fundamentó su decisión en que las pruebas que presentó la fiscalía no alcanzaron a superar la duda razonable, tanto acerca de la data de las lesiones como del elemento con el que fueron provocadas y, fundamentalmente, sobre la autoría de estas lesiones denunciadas por los 3 detenidos en la comisaría 41.
Por su parte, la defensa presentó una teoría del caso basada en la posibilidad de que los detenidos se hayan lesionado entre ellos o que haya habido alguna otra persona involucrada. Los jueces entendieron que el material probatorio presentado en el juicio por parte de la fiscalía, no era suficiente para desestimar estas hipótesis.