En su cuenta de Telegram, el presidente ucraniano aseguró que "en 105 días de guerra, Rusia ha golpeado las ciudades ucranianas: negocios, puentes, universidades e incluso edificios residenciales".
El presidente de Ucrania, Volodimir Zelenski, comparó este jueves la invasión rusa con la pandemia de coronavirus y aseguró que "las vacunas son las armas y las sanciones".
"Las armas y sanciones también son una vacuna; una vacuna frente a una enfermedad que ha traído Rusia", manifestó el líder ucraniano en su cuenta de Telegram.
"El virus se llama odio y es más mortífero que la Covid-19", abundó, antes de referirse a la guerra como la "Covid-22".
Señaló que el virus se propaga "a través de la propaganda rusa, la impunidad de los asesinos, la permanencia del petróleo ruso en el mercado global y el movimiento de dinero ruso dentro de los sistemas financieros globales", recogió Europa Press.
En este contexto, enfatizó que el dinero ruso "ya está manchado de sangre" y recordó que miles de personas han muerto y millones se han visto obligadas a abandonar sus casas debido a la guerra. "Cuando el odio llame a tu puerta ¿estarás preparado? ¿Puede una mascarilla protegerte de la Covid-22 rusa? ¿Por qué es tan difícil lograr garantías suficientes?", interpeló.
"Cuando el odio llame a tu puerta ¿estarás preparado? ¿Puede una mascarilla protegerte de la Covid-22 rusa? ¿Por qué es tan difícil lograr garantías suficientes?", interpeló.
Además, indicó que Rusia lanzó más de 2.600 misiles contra territorio ucraniano, la mayoría "contra objetivos civiles".
"En 105 días de guerra, Rusia ha golpeado las ciudades ucranianas: negocios, puentes, universidades e incluso edificios residenciales", afirmó, y cifró en 283 los niños que han muerto desde el inicio de la invasión.
Por otra parte, alertó que millones de personas podrían "morir de hambre" si Ucrania no consigue exportar sus granos.
"Esto implica que, desafortunadamente, podría producirse una escasez de productos en decenas de países de todo el mundo y millones de personas podrían pasar hambre si Rusia sigue bloqueando el tráfico en el mar Negro", sostuvo.
"Mientras nosotros tratamos de proteger la libertad, otra persona sigue chantajeando al mundo con pasar hambre", dijo Zeleneski, que acusa a Rusia de desencadenar una crisis mundial de cereales y poner al mundo al borde de una hambruna global.
En esa línea, el mandatario ucraniano pidió la exclusión de Rusia de la Organización de la ONU para la Alimentación y la Agricultura (FAO)-
"No puede haber ninguna discusión para prolongar la adhesión de Rusia a la FAO. ¿Qué hace Rusia ahí si provoca el hambre de al menos 400 millones de personas, o potencialmente a más de 1.000 millones de personas?", dijo Zelenski en una videoconferencia durante una reunión ministerial de la OCDE en París.
El mandatario recordó que el mar Negro, una de las rutas clave en el mundo para la exportación de alimentos, "está bloqueado por la marina rusa".
Junto con las sanciones occidentales a Rusia, que impiden a Moscú vender gran parte de su grano en el extranjero, el bloqueo ha disparado los precios de los alimentos y provocó advertencias de hambruna en Medio Oriente y África.
Ayer el presidente ruso, Vladimir Putin, aseguró que está dispuesto a crear "la logística necesaria" y a garantizar el transporte de cereales desde los puertos de Berdiansk y Mariupol, en el sur de Ucrania, "sin ninguna condición previa".
Su canciller, Serguei Lavrov, afirmó en unas conversaciones respaldadas por la ONU en Turquía que Moscú estaba dispuesto a conceder el paso seguro a los barcos que transportan maíz y trigo ucranianos.
Creada en 1945 y activa en 130 países del mundo, la misión de la FAO es "lograr la seguridad alimentaria para todos", según su sitio de internet. Rusia es miembro desde 2006.