Hoy se firmó un convenio entre la subsecretaría de las Mujeres, el CPE y la Universidad Nacional del Comahue.
Con el objetivo de aportar herramientas para brindar una solución habitacional a mujeres en situación de grave vulnerabilidad social y a sus familias, se presentó hoy el proyecto “Viviendas autogestivas y solidarias por y para mujeres”. Fue durante un acto realizado en Casa de Gobierno y que presidió el gobernador Omar Gutiérrez.
El mandatario felicitó a las participantes por la iniciativa y aseguró que “hay mucho más por avanzar, perfeccionar y corregir, podemos ver en nuestro andar diario y cotidiano que hoy no hay dispositivos, normativas que propicien, promuevan y fortalezcan la perspectiva de género”.
“Cuando recorremos las obras, la mayoría de los trabajadores son hombres. En una obra pública o privada es raro encontrarse con una mujer trabajando, pegando ladrillos, haciendo las bases, llevando adelante el trabajo de yesería. Ahí es donde el Estado tiene la responsabilidad de promover”, aseguró.
Gutiérrez sostuvo que “este es un prototipo, es un ejemplo que hay que replicar” y agregó que “achicar la brecha de desarraigo tiene que ver con que la mujer pueda desarrollarse en su lugar de origen. Muchas veces hay causales de violencia que están vinculadas a la falta de posibilidad de que la mujer sea independiente y tenga accesibilidad al desarrollo personal y familiar”.
Precisó que “la accesibilidad se da a partir de un proceso virtuoso y positivo de formación y capacitación, en el cual la construcción no puede ser una batalla perdida en materia de perspectiva de género, tiene que ser un espacio más en el cual nuestras mujeres puedan conseguir trabajo”.
El gobernador recordó que “este año vamos a presentar la Ley de Presupuesto con perspectiva de género, cada uno de los pesos que se inviertan en las distintas metas, objetivos, categorías programáticas, finalidades, tendrá que detallar cuánto se invierte en fortalecimiento de la perspectiva de género”.
Por su parte, la ministra de las Mujeres y de la Diversidad, María Eugenia Ferraresso, destacó el “trabajo articulado de las diversas instituciones que participan para lograr este programa modelo para el acceso universal al hábitat, el derecho a la vivienda, y el derecho a un ambiente sano”.
Indicó que este programa hace posible que “estas mujeres en situación de extrema vulnerabilidad puedan ser protagonistas, que se pueden empoderar” y consideró que las mujeres “no solo van a recibir la llave de una vivienda, sino que fueron parte durante todo el proceso de diagnóstico, participaron en el armado del proyecto y van a ser parte en el proceso de construcción, lo cual implica que también van a tener una salida laboral”.
Durante el proceso constructivo, ocho mujeres tendrán la posibilidad de aprender los oficios que forman parte del rubro de la construcción “y contar con una salida laboral y con una solución habitacional”, dijo la ministra y agregó que el objetivo es que “esta herramienta sirva para seguir dando respuestas habitacionales a mujeres en situación de vulnerabilidad y también una salida laboral”.
En tanto, Patricia Maistegui, subsecretaria de las Mujeres, consideró que “la condición de vulnerabilidad está. Tenemos un problema de empobrecimiento de las mujeres, de falta de salida laboral” y agregó que “el derecho a la vivienda es un derecho fundamental”.
Durante la presentación, también se firmó un convenio entre el ministerio de las Mujeres y la Diversidad, el ministerio de Niñez, Adolescencia, Juventud y Ciudadanía; el Consejo Provincial de Educación (CPE); y la Facultad de Ingeniería de la Universidad Nacional del Comahue (UNCo).
De esta manera, se busca promover el empoderamiento de mujeres en situación de vulnerabilidad, impulsando su independencia y autonomía, haciéndolas protagonistas en la construcción de sus propias viviendas, para lo que serán capacitadas y contratadas por la empresa que resulte ganadora de la licitación. En esta primera instancia fueron seleccionadas ocho jefas de hogar.
Participaron además la ministra de Niñez, Adolescencia, Juventud y Ciudadanía, Sofia Sanucci Giménez; el titular del IPVU-ADUS, Marcelo Sampablo; la presidenta del Consejo Provincial de Educación (CPE), Ruth Flusch; y la decana de la Facultad de Ingeniería de la Universidad Nacional del Comahue (UNCo), Ana María Basset.
Detalle del proyecto
Está financiado por la Provincia del Neuquén y la inversión es de 82.306.520 pesos, con recuperación a largo plazo definida por el Instituto Provincial de la Vivienda y Urbanismo (IPVU). El predio fue definido y aportado por el IPVU y se encuentra ubicado en la ciudad de Neuquén.
Se trata de una iniciativa intersectorial de la que participan el ministerio de las Mujeres y de la Diversidad a través de la subsecretaría de las Mujeres, el ministerio de Niñez, Adolescencia, Juventud y Ciudadanía a través de la subsecretaría de Ciudades Saludables y Prevención de Consumos Problemáticos, el IPVU-ADUS así como el Consejo Provincial de Educación (CPE) a través de Centro de Formación Profesional N°36 y la Universidad Nacional del Comahue a través de la Facultad de Ingeniería.
Está diseñado para dar respuesta a mujeres en situación de vulnerabilidad, en Neuquén capital. Convoca a ocho mujeres jefas de hogar para la participación en el proceso constructivo de las viviendas de las que resultarán adjudicatarias, mediante su incorporación como mano de obra remunerada a través de la empresa contratista que resulte adjudicataria de la obra. A tales fines, se les proporcionará formación específica en el rubro de la construcción.
El IPVU se compromete a financiar y llevar adelante la contratación para la realización del proyecto en un lote propiedad del organismo, promoviendo la participación de las mujeres en el proceso constructivo mediante su incorporación como mano de obra remunerada. Será requisito indispensable la previa capacitación en el oficio de las ocho mujeres adjudicatarias de las viviendas, por parte del Centro de Formación Profesional (CFP) N° 36, y/o la Facultad de Ingeniería de la UNCO, con su respectiva certificación.
Este proyecto fue elaborado por la Red Solidaria de Mujeres del Oeste, con la subsecretaría de las Mujeres. Surgió en 2020 en el contexto de aislamiento producto de la pandemia con el objetivo de potenciar los recursos y fortalecer el trabajo social y comunitario a través de estrategias de intervención acordes a ese momento de crisis.