La historia de la joven de 22 años, llamó la atención de los medios después de que su madre la identificara en un video de Hamas por su tatuaje. Si bien el cuerpo no se encontró, el resultado de ADN sobre una astilla de hueso hallada por el Ejército israelí confirmó que pertenecía a la joven.
El presidente israelí, Isaac Herzog, confirmó este lunes la muerte de una joven alemana secuestrada en territorio israelí por el movimiento islamista palestino Hamas el sábado 7 de octubre, y reveló que a la víctima, a quien se la vio en un video malherida a bordo de un camioneta, "le cortaron la cabeza".
"Hemos recibido noticias de que se ha confirmado que Shani Nicole Louk ha sido asesinada. Se ha encontrado su cráneo", dijo hoy el presidente Herzog en una entrevista con el medio alemán Bild.
"Eso significa que estos animales bárbaros y sádicos simplemente le cortaron la cabeza mientras atacaban, torturaban y mataban a israelíes. Es una gran tragedia y expreso mi más sentido pésame a su familia", agregó el mandatario israelí.
La madre de la joven alemana, con doble nacionalidad israelita, había informado previamente que su hija estaba muerta, citando fuentes militares.
Según el Ministerio de Exteriores de Israel, “se confirmó la muerte de la alemana-israelí Shani Louk, de 23 años. Shani, que fue secuestrada en un festival de música, torturada y paseada por Gaza por terroristas de Hamas, experimentó horrores insondables".
"Desafortunadamente, ayer recibimos la noticia de que mi hija ya no está viva", dijo la madre de la joven, Ricarda Louk, en una entrevista con los canales de televisión alemanes RTL y NTV, según recogió la agencia de noticias Sputnik.
La mujer aseguró que así se lo comunicó el Ejército israelí durante la madrugada de este lunes, aunque añadió que el cuerpo de su hija todavía no ha sido encontrado.
Sin embargo, detalló, fue hallada una astilla de un hueso del cráneo y se había tomado de ella una muestra de ADN, informó la agencia de noticias Europa Press.
Los padres proporcionaron hace tiempo el material necesario para proceder a una posible identificación.
La historia de Shani Louk, de 22 años, llamó la atención de los medios de comunicación mundiales después de que su madre la identificara en un video de Hamas por su tatuaje.
En el envío audiovisual se podía ver a los combatientes de Hamas llevar en el baúl de una camioneta a una chica boca abajo con las piernas torcidas de una manera poco natural.
En un principio, la familia de Shani Louk, parte de la cual vive en el estado federado de Baden-Württemberg, en el suroeste de Alemania, supuso que había resultado gravemente herida, pero que estaba viva y se encontraba en la Franja de Gaza, donde supuestamente había recibido tratamiento médico en un hospital.
La familia ha estado haciendo campaña por la liberación de todos los rehenes desde el ataque.
La madre de Shani, una católica que más tarde se convirtió al judaísmo, emigró a Israel, pidió a las autoridades alemanas que "no discutieran sobre la responsabilidad", pero que "sacaran" a la joven de Gaza y la devolvieran a casa.
Más tarde, la mujer supuso que su hija llevaba muerta desde el 7 de octubre, como consecuencia de un posible disparo en la cabeza durante el ataque de Hamas.
La familia consideraba que Shani fue asesinada en un festival de música en el desierto israelí del Naguev. Según el informe, fotos y videos que circulaban por Internet mostraban el cadáver de la joven en una camioneta.
Ricarda calificó de terrible la confirmación de la muerte de su hija.
Su padre es un judío que vive en Israel.
Durante el ataque de Hamas, más 1.400 personas murieron y más de 230, entre israelíes y extranjeros, fueron capturadas como rehenes.
El Ejército israelí informó haberse comunicado con 239 familias. Según fuentes militares, 40 personas siguen desaparecidas desde el ataque. Debido al estado de muchos de los cadáveres, aún no se ha completado su identificación.
En respuesta, Israel bombardea Gaza, que se encuentra bloqueada y prácticamente sin suministros de energía, Internet y agua potable.
Los corredores humanitarios se encuentran obstruidos y la ayuda ingresa a cuentagotas.
Debido a los bombarderos israelíes, más de 8.300 gazatíes murieron, entre los que se cuentan mujeres, niños y ancianos.