Las provincias alcanzadas por el alerta amarilla son: San Luis, Córdoba, Santa Fe, Entre Ríos y Buenos Aires. Para todos los casos los valores de precipitación acumulada se estiman entre 30 y 60 milímetros.
Localidades de San Luis, Córdoba, Santa Fe, Entre Ríos y Buenos Aires se encontraban la mañana de este lunes bajo alerta amarilla por tormentas, que pueden estar acompañadas por ráfagas, ocasional caída de granizo e intensa actividad eléctrica, mientras que en Tierra del Fuego y la costa de Santa Cruz se esperan vientos entre 50 y 70 kilómetros por hora, informó el Servicio Meteorológico Nacional (SMN).
En San Luis, se prevén tormentas en la zona central (zona baja de Belgrano, Juan Martín Pueyrredón, Coronel Pringles y General Pedernera) y en Córdoba se esperan en el centro y sur provincial (Juárez Celman, zona baja de Río Cuarto, Marcos Juárez, General San Martín, Unión, entre otros departamentos).
En el caso de Santa Fe, la alerta amarilla rige para localidades del sur, como Rosario, Constitución y San Lorenzo, en tanto que en Entre Ríos abarca a los departamentos de Colón, Gualeguaychú, Victoria y Gualeguay, entre otros.
También rige el aviso para las ciudades de Baradero, Ramallo, San Nicolás y San Pedro, en el norte de la provincia de Buenos Aires.
Para todos los casos los valores de precipitación acumulada se estiman entre 30 y 60 milímetros, pudiendo ser superados en forma puntual, a excepción de San Luis que se prevé entre 15 y 30 milímetros.
Para los habitantes de las zonas bajo alerta por tormentas, el SMN recomendó evitar actividades al aire libre, no sacar la basura y retirar objetos que impidan que el agua escurra, no refugiarse cerca de árboles y postes de electricidad que puedan caerse y, para minimizar el riesgo de ser alcanzado por un rayo, no permanecer en playas, ríos, lagunas o piletas.
Por otra parte, el Servicio Meteorológico emitió alerta amarilla para Tierra del Fuego, incluida las Islas Malvinas, y las costas de Güer Aike y Corpen Aike, en Santa Cruz, por vientos del sector oeste con velocidades entre 50 y 70 kilómetros por hora y ráfagas que pueden alcanzar los 100 kilómetros por hora.