El hecho ocurrió el 21 de diciembre del año 2021, cuando la pareja llevó al pequeño de dos años y diez meses a la guardia del Hospital Pasteur de la ciudad de Villa María, donde los médicos constataron que tenía graves lesiones.
Una joven fue condenada este viernes a 10 años de prisión por la muerte de su hijo de dos años y diez meses, que falleció como consecuencia de “maltrato y golpes” en la ciudad cordobesa de Villa María en diciembre de 2021, informaron fuentes judiciales.
El padrastro de la víctima, Jonathan Fernández, recibió una pena de 23 años de cárcel por el “homicidio y lesiones gravísimas calificadas por el vínculo”, en perjuicio de Emiliano Messa.
Voceros judiciales informaron que el Tribunal de la Cámara del Crimen de Villa María, en el marco de un juicio por jurados, condenó a Ana Yael Piedra (29) por el delito de “lesiones gravísimas calificadas por el vínculo”.
El juicio comenzó el pasado lunes y el fiscal de Cámara, Francisco Márquez, en sus alegatos había solicitado 9 años de prisión para Piedra y prisión perpetua para Fernández.
Tras ser condenados, ambos continuarán alojados en el penal de Bouwer de la capital de Córdoba.
El hecho ocurrió el 21 de diciembre de 2021, cuando la madre y el padrastro llevaron al pequeño a la guardia del Hospital Pasteur de la ciudad de Villa María, donde los médicos constataron que el niño tenía graves lesiones.
Según la joven y su pareja, el nene se había caído en el baño y su cabeza había impactado contra el bidet.
Debido a la gravedad de las lesiones, el chico fue trasladado al Hospital de Niños de la capital de Córdoba, donde falleció el 23 de diciembre como consecuencia de las severas lesiones, tales como fractura en la zona occipital del cráneo y hematoma subdural frontal bilateral.
El médico forense Gustavo Rodríguez, uno de los que realizó los estudios sobre las lesiones que tenía Emiliano, testimonió en el juicio que las lesiones no eran compatibles con una caída, como habían relatado la madre del niño y su pareja.
Al respecto, Rodríguez especificó que “se encontraron 24 lesiones, muchas de ellas crónicas”, por lo tanto, la conclusión fue que el niño era “víctima de maltrato físico y psicológico”.
José Messa, el papá biológico de Emiliano, a través de sus abogados querellantes, había solicitado la prisión perpetua para su exesposa y la pareja de esta, quienes tenían la guarda del niño.
“Estoy viviendo el peor momento de mi vida. Tuvo la cobardía de maltratar, pegar y matar a un niño. Nunca se hizo cargo de sus acciones”, dijo al referirse a Fernández, al que sindica como el autor del crimen, mientras que, para él, la mamá “consintió” esa conducta.