Como cada miércoles, jubilados y pensionados volvieron a marchar hoy frente al Congreso de la Nación para reclamar contra el ajuste del presidente Javier Milei al sistema previsional. Sin embargo, en esta ocasión, la convocatoria cobró un carácter multisectorial, sumando a diversos grupos afectados por las políticas del Gobierno.
Entre los manifestantes se hicieron presentes médicos residentes del Hospital Garrahan, científicos, personas con discapacidad y el colectivo Ni Una Menos, que además conmemora el décimo aniversario de su primera marcha.
Como ya es habitual en cada movilización, horas antes de la convocatoria, el Congreso amaneció totalmente vallado y con una fuerte presencia de las fuerzas de seguridad, en aplicación del protocolo antipiquete impulsado por la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich.
En medio del conflicto que mantienen desde hace días por sus condiciones laborales, los trabajadores del Hospital Garrahan se unieron al reclamo de los adultos mayores para exigir salarios dignos, la declaración de la emergencia en discapacidad, el tratamiento de la Moratoria Previsional, el incremento de jubilaciones y también por la reforma migratoria.
Además, un numeroso grupo de científicos argentinos, muchos de ellos empleados del CONICET, se sumó a la protesta para visibilizar su rechazo a los fuertes recortes presupuestarios que afectan el área de ciencia y tecnología, poniendo en jaque el desarrollo de la investigación en el país.