Por: Centro de Veteranos Ypefianos de Cutral Co y Plaza Huincul
Enrique Carlos Alberto Mosconi nació el 21 de febrero de 1.877 en Buenos Aires y murió el 4 de junio de 1.940. Fue militar e ingeniero, pero, sobre todo, el hombre que pensó y organizó la exploración y explotación del petróleo en la Argentina y, como parte de ello, el creador de YPF. La empresa que abrió caminos, creó miles de puestos de trabajo, fundó pueblos y, en definitiva, nos dio a ciento de miles de ypefianos una razón de vida: hacer Patria sacando petróleo y poblando regiones inhóspitas y desoladas del país.
Mosconi tuvo una visión integral e integradora del país. Egresó como subteniente de infantería el 20 de noviembre de 1894, a los 17 años de edad y fue destinado a Río Cuarto. Pero nunca se quedó quieto: en 1899 realizó estudios topográficos y estadísticos de los Andes en la provincia de Mendoza, y el año siguiente formó parte en los estudios llevados a cabo en la Patagonia a fin de establecer una red ferroviaria que llegara hasta la provincia del Neuquén.
En 1903 se graduó de la Facultad de Ciencias Exactas Físicas y Naturales de la Universidad de Buenos Aires como ingeniero civil. Su tesis de grado fue un proyecto de construcción de una represa en el Lago Nahuel Huapi e instalación de una válvula para regular las aguas de los ríos Limay y Negro, en Neuquén, con el objetivo de hacerlos navegables.
En 1.922 es designado Director de Yacimientos Petrolíferos Fiscales y empieza la lucha de Mosconi que proponía lisa y llanamente la “Nacionalización de todo el combustible, Monopolio estatal de la explotación, Control estatal de la exploración, Monopolio estatal del transporte del combustible, Autonomía de YPF, Prohibición de transferir las concesiones.”
Señalaba que "los grandes trust son organizaciones insaciables, difíciles de dominar una vez que han tomado de las tierras y se les ha acordado facultades y derechos" en referencia a empresa como la Standard Oil.
"No queda otro camino que el monopolio del Estado pero en forma integral, es decir, en todas las actividades de esta industria: la producción, la elaboración, el transporte y el comercio […] sin monopolio del petróleo es difícil, diré más, es imposible para un organismo del Estado vencer en la lucha comercial las organizaciones del capital privado", insistía el General Enrique Mosconi.
En 1.927 logró que la Cámara de Diputados sancionara la Ley de Nacionalización del Petróleo. Pero el Senado, compuesto mayoritariamente por Conservadores la rechazaron sucesivamente.
En 1.930 se produce el golpe de Estado de José Félix Uriburu. Mosconi, un demócrata cabal, renunció a sus cargos y fue encarcelado aunque luego liberado. Finalmente, en 1.931, Uriburu designa al General Mosconi como Director de Esgrima y Tiro del Ejército, una asignación que fue un demérito para una mente brillante.
En 1933 Mosconi sufrió un ataque de hemiplejía aunque, de todos modos, escribió su libro “El Petróleo Argentino – 1922-1930”. Finalmente, falleció el 4 de junio de 1.940: su cuenta personal del banco de la Provincia de Buenos Aires, tenía un saldo de $ 9,90 y la casa, que compartía con sus dos hermanas en la calle Aráoz 2592, adquirida con un préstamo del Banco Hipotecario Nacional, se encontraba intimada por falta de pago de varias cuotas.