El tercer puesto en Rusia 2018 de los "Diablos Rojos", implica que deberán afrontar un desafío complejo y poder mantenerse entre los ocho mejores equipos de este mundial.
Por Fernando Bianculli
Bélgica afrontará el Mundial de Qatar después de concretar su mejor actuación histórica en la edición anterior, lo que implica un desafío complejo según el adagio popular que reza que lo difícil no es llegar sino mantenerse.
Para desmentir el proverbio, el seleccionado belga deberá, de mínima, igualar el tercer puesto en Rusia 2018, logrado con un grupo de futbolistas que, en varios casos, cruzaron ahora la barrera de los 30 años y no gozan la misma actualidad que cuatro años atrás.
El caso más preocupantes en pos de una recuperación se centra en el creativo mediocampista Eden Hazard (31), Balón de Plata en la anterior Copa del Mundo pero perseguido por las lesiones desde que se incorporó al Real Madrid a mediados de 2019.
El centrodelantero Romelu Lukaku (29), su máximo goleador en Rusia con 4 tantos, tampoco se encuentra esta temporada en su mejor forma tras regresar a Inter de Milán luego de un paso negativo por Chelsea, donde tuvo problemas con el entrenador alemán Thomas Tuchel.
Frente al panorama de ambas figuras, la máxima esperanza de Bélgica recae sobre el exquisito mediocentro ofensivo Kevin De Bruyne (31), pieza intocable en el Manchester City de Pep Guardiola.
El arquero Thibaut Courtois, clave en Real Madrid para la conquista de la última Champions League, el defensor Thomas Meunier (Borussia Dortmund), el lateral Timothy Castagne y el mediocampista Yuri Tielemans, ambos Leicester City, y el delantero Yannick Carrasco, hombre de Diego Simeone en el Atlético de Madrid, también componen una parte importante de su estructura.
Otros partícipes de la gesta en Rusia como Toby Anderweireld (33), Jan Verthogen (35), Axel Witsel (33), Dries Mertens (35), de brillante pasado en Napoli, ingresaron en el período final de su carrera.
Bélgica, al mando del técnico español Roberto Martínez desde 2016, lideró el ranking FIFA desde octubre de 2018 hasta marzo de este año cuando le cedió el torno a Brasil, al que eliminó en los cuartos de final de la anterior Copa del Mundo.
Su privilegiado lugar en el escalafón le permitió llegar al sorteo de Qatar 2022 como uno de los 8 cabezas de serie y el azar lo emparejó en el Grupo F junto a Croacia -subcampeón del mundo-, Canadá y Marruecos.
Martínez (49 años), de origen catalán, es un fiel intérprete de la cosmovisión futbolística que reina en esa región, aunque toda su formación deportiva la realizó en tierras británicas.
Como jugador, al salir del Zaragoza B, militó en Wigan, Motherwell, Warsall, Swansea City y Chester City y ya retirado inició su etapa de entrenador en Swansea, Wigan y Everton.
En noviembre de 2021, una fecha antes de culminar las Eliminatorias de la UEFA, el seleccionado de Martínez le ganó como local a Estonia, aseguró el primer puesto en su zona y sacó boleto a la cita máxima de la FIFA en Medio Oriente.
Los "Diablos Rojos" serán protagonistas de una Copa del Mundo por decimocuarta vez en su historia, tercera de forma consecutiva. Su agenda de partidos en la ronda inicial es la siguiente: Canadá (miércoles 23 de noviembre a las 16:00, estadio Ahmad bin Ali); Marruecos (domingo 27 a las 10:00, estadio Al Thumama) y Croacia (jueves 1 de diciembre a las 12:00, Ahmad bin Ali) en un partido de la última fecha que presupone la definición del primer puesto del grupo.
En la Eurocopa, competencia más trascendente camino a Qatar, Bélgica llegó hasta los cuartos de final cuando fue eliminado por el campeón Italia (1-2) en Múnich. Hasta esa instancia su andar había sido perfecto: victorias sobre Rusia (3-0), Dinamarca (2-1), Finlandia (2-1) y Portugal (1-0) en octavos.
La última Liga de Naciones de la UEFA lo tuvo entre sus semifinalistas después imponerse en la zona ante Inglaterra, Dinamarca e Islandia. Sin embargo, en la definición, cayó primero ante el campeón mundial Francia (2-3) y luego otra vez con Italia (1-2) en el partido del tercer puesto.