Trabajadores y trabajadoras del Inadi nucleados en ATE iniciaron este atardecer una vigilia en la sede central del organismo que concluirá recién mañana a las 11, cuando los y las manifestantes marchen hacia el ministerio de Justicia para reclamar la vuelta atrás de los 160 despidos, en coincidencia con la apertura de una mesa de negociación por todas las cesantías en esa cartera.
“La movida de hoy es iniciar una vigilia de visibilización, con una radio abierta y un acampe donde todes les compañeres puedan expresarse, contar la situación que están. Vamos a hacer luego un encendido de velas y a pernoctar acá”, dijo a Somos Télam Lidia Pérez, trabajadora despedida la semana después de integrar durante 16 años la planta transitoria.
Otro de los despedidos, Martín Lanfranco con 17 años de antigüedad en el instituto, aseguró que “mañana debería ocurrir que se reincorpore de manera automática a las personas que están amparadas por leyes como el cupo de discapacidad y el laboral travesti trans así como la ley de VIH”, incluso antes de iniciarse las negociaciones por la reinstalación de todos los despedidos y despedidas.
Sobre todo porque si el Estado empieza a incumplir estas leyes, esto actuará como una forma de disciplinamiento de la sociedad y dará de rienda suelta a los empresarios para que empiecen a despedir a personas viviendo con VIH, por ejemplo, de manera impune”, dijo.
Sin trabajadores no hay listado
Un nutrido grupo de trabajadores y trabajadoras, dirigentes y delegados de ATE de diferentes organismos así como activistas y legisladores se dieron cita en la esquina de Avenida de Mayo y Uruguay desde la media tarde, rodeados de un cerrado cordón policial que les impidió todo el tiempo bajar hasta la calle.
Enmarcando la manifestación concentrada en la vereda, podían leerse carteles colgados de los andamios que rodean el edificio con las leyendas “La Casta eras vos”, “Sin trabajadores no hay Estado” y “Basta de Despidos”.
En el Instituto Nacional contra la Discriminación (INADI) creado por ley en 1994, se produjeron dos tandas de despidos desde la asunción de Javier Milei: 40 durante la Semana Santa y otros 120 la semana pasada, a los que se suma uno más acontecido en el día de hoy. En todos los casos, fueron notificados por el sistema GDE.
“Al comienzo de la gestión de Milei éramos menos de 350 personas, y ahora quedan 60 o 70 para trabajar contra la discriminación en una sociedad de 46 millones de habitantes. Algunas áreas fueron cerradas porque echaron a todas y todas, mientras que otras quedaron en pie con una sola persona”, contó Lanfranco.
Los reclamos
Entre los despedidos hay “ocho personas trans y cuatro con discapacidad”, pero también “algunas personas viviendo con VIH” que están amparadas por la ley 27.675 de Respuesta Integral que protege a esta población, entre otras cosas, frente a despidos arbitrarios.
“Exigimos, de máxima la reincorporación de todes les compañeres y (de mínima) que se respeten los cupos de diversidad sexual y discapacidad, y la ley de VIH”, acotó Pérez quien estaba a cargo de uno de los programas cerrados, el de “Derechos humanos para personas privadas de la libertad” cuyo territorio de acción eran las cárceles de todo el país.
Pérez explicó que “la gran mayoría de los despedidos tenemos más de 10 años de antigüedad” y la falta de acceso a la planta permanente por concurso “es una deuda de la democracia”.
Pero además “casi todos se desempeñaban en el ‘área de políticas y prácticas’, que era el área donde se desarrollaban las diferentes políticas públicas para los grupos más vulnerados”, los mismos que son víctimas de los “discursos de odio” que el propio gobierno genera y “por eso no le conviene que el Inadi esté presente”.
Unidad en la lucha
De la radio abierta participaron también personalidades como la diputada nacional Mónica Macha, la legisladora porteña Celeste Fierro y la secretaria general de la APDH María Elena Nadeo; así como delegados de otros sindicatos en conflicto en el ámbito público como el Sipreba, quienes llevaron su apoyo y contaron el conflicto que mantienen con la intervención de la agencia Télam.
“Queremos agradecerles por la resistencia, por el ejemplo, pero también por la tarea que hacen porque para nosotros ustedes son fuente directa para poder visibilizar la discriminación y la desigualdad de la sociedad en la que vivimos, y que también es parte de lo que este gobierno nacional propone “, dijo Sabino Cabrera, integrante de la CGI de Sipreba en Télam.
“Coincidimos con ustedes en la necesidad organizarnos paras resistir no solo el DNU, sino la nueva ley bases y toda la política que lleva adelante este gobierno nefasto. No va a ser fácil pero si nos sostenemos y organizamos podemos darlos vuelta (a los intentos de cierre) y mantener instituciones -como el Inadi, como Télam- desde las cuales el Estado a través de sus laburantes – que ponemos el pecho para que esto se realice- garantizamos derechos para toda nuestra ciudadanía”, dijo.
Siguiendo con las comparaciones, Lanfranco explicó que el Inadi, al igual que la Agencia Télam, no está cerrado sino que “sigue funcionando” porque “fue creado por ley” y sólo podría ser eliminado de la misma forma.
“El Inadi nunca cerró a pesar de los anuncios que hizo el vocero presidencial en su momento y que fue ratificado por el presidente en la apertura de sesiones, pero sigue funcionando entre comillas, porque la mayoría no tenemos tareas y lo único que sigue en pie es la mesa de entradas para la atención a las denuncias presenciales así como la línea telefónica 168 de asesoramiento y denuncias”, dijo.
Esta confusión operada en la sociedad sobre el funcionamiento del Inadi produjo ya “una merma” en la denuncias y hoy en día “casi no se reciben llamados en la línea 168 que funcionaba incluso los fines de semana”
“Por otro lado, al despedir tantos trabajadores se está teniendo dificultades para llevar adelante el proceso que en general se hace después de que se hace la denuncia”, explicó.