La ministra de Salud Andrea Peve junto al director del Hospital Provincial Neuquén (HPN), Adrián Lammel, y el jefe del Servicio de Oncología, Julián Iturbe, inauguró la obra del búnker donde funcionará el acelerador lineal de dicho hospital y los consultorios oncológicos.
La iniciativa posiciona a la provincia de Neuquén como la primera de la Patagonia, en contar con este equipamiento de última generación en un hospital público para el tratamiento contra el cáncer.
Se trata de una obra concretada en el marco del Plan Quinquenal de Gobierno, en articulación con la Secretaría General y Servicios Públicos, y representa un importante salto cualitativo brindando una atención de vanguardia a las personas que se encuentran en tratamiento.
Durante la recorrida, Peve resaltó: “Para nosotros es un orgullo tener un equipo de estas características, una gran inversión y una gran apuesta a la mejora de la tecnología, para que el Sistema Público de Salud tenga la mejor tecnología en la materia, no solamente hablamos del equipamiento, hablamos de por supuesto un equipo que lleva adelante este tratamiento, a la cabeza con el Dr. Iturbe. Hoy acá estamos las autoridades, pero también hay parte de los equipos que están trabajando en este lugar a quienes realmente les agradecemos muchísimo porque este equipo fue un equipo muy esperado”.
Asimismo, la titular de la cartera sanitaria indicó: “La obra es muy especial para contener a este equipo, para la cual han trabajado distintos organismos. Hay un trabajo muy importante de Obras Públicas, de INVAP que también es quién llevó adelante las mediciones y todo lo que respecta al equipo. Para nosotros es estar siempre en la vanguardia de la alta tecnología, no solamente en Neuquén como decíamos sino también en la Patagonia”.
Peve expresó que también hay un trabajo muy importante del gobernador Omar Gutiérrez en esto, para seguir fortaleciendo y continuar ampliando la red tecnológica. “No solamente con este equipamiento acá, sino también sumar a la red otros equipos de alta tecnología, como son tomógrafos, mamógrafos, en diferentes lugares para que conformen, por supuesto, la red de tecnología en toda la provincia. Así que estamos felices y como comentábamos recién, este es un primer paso, no está hoy la inauguración definitiva que se va a dar el día que el equipo comience a funcionar”, apuntó Peve.
Por su parte, Lammel afirmó: “Estamos muy contentos, esto es un sueño que tuvimos hace muchísimo tiempo de poder cambiar la bomba de cobalto por el acelerador lineal y hoy llegó el día donde la parte edilicia está terminada y el aparato está instalado. Los aparatos son importantes, pero más importantes son los trabajadores, las personas que llevan adelante todo esto, primero con la instalación y luego con la puesta en funcionamiento. Como dijo la ministra hay mucha gente del Ministerio que ha trabajado junto a nosotros.”
En este sentido, el director del HPN aclaró que actualmente empezaron a utilizar los consultorios para atención de pacientes y que están esperando que las autoridades regulatorias nuclear den el aval para iniciar. “Es un trámite de rigor que se hace y, una vez que ya está instalado el aparato, es una cuestión de seguridad y cuestiones burocráticas que pide la Autoridad Regulatoria Nuclear durante dos o tres meses que tiene que ver con diferentes cosas como la capacitación de gente, mediciones por parte de ellos. Está listo todo para empezar de nuestra parte”, detalló.
Lammel describió las nuevas instalaciones e indicó que son todos consultorios nuevos y sala de espera; “todo un edificio que hace mucho estábamos esperando y la verdad que el Servicio de Oncología y de Radioterapia pasa a ser de punta en Neuquén”. De esta manera, explicó que tal como el hospital fue el primero en tener una bomba de cobalto en la Patagonia en el Sistema Público, ahora nuevamente es el primer hospital público de la Patagonia en tener un acelerador lineal.
“El acelerador lineal es para el tratamiento de cáncer. Es un aparato, un acelerador que emite rayos X de alta energía, electrones; que se personaliza y van dirigidos al tumor. Lo bueno y lo que se diferencia de la bomba de cobalto es que es tan preciso que no irradia zonas que están sanas. Eso permite una calidad de tratamiento muchísimo mayor. Es un aparato de última generación en el mercado”, concluyó.
Finalmente, el jefe del Servicio de Oncología del HPN, Julián Iturbe, sostuvo: “El beneficio es para el paciente. En radioterapia se calcula que entre el 80 por ciento y el 90 por ciento de los pacientes que tienen cáncer en algún momento de su transcurrir de la enfermedad van a necesitar radioterapia. Esa es la importancia que tiene este equipo. Como ya lo dijeron es un equipo que nos va a permitir hacer tratamientos que se podrían hacer en cualquier parte del mundo, puede hacer la radioterapia que nosotros queramos”.
En este sentido, agregó: “Vamos a estar haciendo los mejores que existen hoy para el paciente. Claramente que esto es un beneficio y todos nos ponemos contentos, pero acá el que se beneficia es el paciente. Para nosotros es un orgullo y estamos más que felices por lo que viene. Los técnicos ya comenzaron con las capacitaciones y en este momento los físicos están en San Pablo. Está todo en marcha y el día que el ente regulador nos diga abran la puerta está todo listo para empezar, no vamos a perder ni medio minuto”.
Iturbe a su vez detalló que la demanda actual que tienen de pacientes se puede cubrir holgadamente, sin ningún tipo de problemas. “Acá las puertas están abiertas y tenemos pacientes de toda la región, vemos pacientes de San Antonio Oeste, de otras partes del país y se tratan, no hay restricción”, apuntó.
La obra del búnker para el acelerador lineal del HPN es una construcción realizada completamente en hormigón, con una superficie total de 522 metros cuadrados, de los cuales 450 metros cuadrados son nuevos y 72 metros cuadrados corresponden a una remodelación. Para la ejecución de la misma se invirtieron 81.193.386,63 pesos y se trabajó articuladamente con la Subsecretaría de Obras Públicas, dependiente de la Secretaría General y Servicios Públicos.
Dentro de los 450 metros cuadrados nuevos de construcción, ampliación y refacción se sitúa una sala de física, de control y de ateneo; cambiadores, sanitarios, cocina, admisión, archivo y sala de espera. En el edificio existente, donde se realizaron las remodelaciones, se instaló el sector de quimioterapia, cuatro consultorios y una oficina administrativa. Sobre la planta alta de la ampliación se realizaron dos oficinas y una sala de reuniones, a la cual se ingresa desde una escalera exterior preexistente.
Por otra parte, desde Salud explicaron que el acelerador lineal funciona como una terapia radiante con electricidad y viene a reemplazar la bomba de cobalto en el tratamiento oncológico. Esta incorporación permitirá duplicar la cantidad de pacientes atendidos y promueve una mejora en el tratamiento de pacientes oncológicos, ya que también funcionará como complemento de otros tratamientos contra el cáncer como las intervenciones quirúrgicas y las quimioterapias.
Para la compra del acelerador lineal Elekta Synergy se realizó una inversión de 5.000.000 de dólares.