Don Molina, que ahora es vecino de la calle Eguinoa de Cutral Co, a los 81 años todavía retiene la historia viva del club y repite casi de corrido los equipos que le llenaron los ojos de fútbol y dieron vueltas olímpicas en el 53, 54 y 55. Que tuvo en sus filas a Miguel Olea, un jugador que fue seleccionado por Racing Club de Avellaneda pero priorizó la seguridad del trabajo petrolero y terminó jugando en el equipo surgido en medio de la nada, como solía ocurrir con YPF.

Cuando Challacó decidió sumarse a la Liga Huincul, lo hizo en segunda división y tuvo un logro enorme: fue Campeón invicto. Tras ese título decidieron armar una comisión directiva.

“Ese equipo (el multicampeón del 53, 54 y 55) formaba con el "Potro" Baracat, un turco que era un arquerazo. Baracat, Nito Martínez y Tapia, que era la defensa. Después iba Pino, Quevedo, un maestro de escuela y Bustamante, que era blanco en canas, pero no era muy viejo y un jugadorazo. Adelante iban: Aragón, Carosio, Briceño, García y León" recuerda con lucidez.

Y sigue: “Le voy a nombrar un equipo que fue Campeón. En el año 71/72 le ganó 1-0 a Club Plaza. El equipo formaba con Héctor "Porra" Rodríguez, un arquero que trajeron de Neuquén. Atrás jugaba Babuin Carrasco, y Adolfo Riquelme. En el mediocampo iba con Briceño, Barrionuevo y había venido un jugador de Mendoza, Mauricio Fernández.

Adelante iba Arriagada, un 7 de primer nivel, Héctor Rojas, otro gran jugador, el "Lechón" Arévalo y la pareja izquierda era el "Tato" Salas y el "Zurdo" Rodríguez. Marcaron una época”, asegura.

El campamento Challacó de YPF, finalmente fue abandonado. “Se acabó el petróleo y en 1.975, se terminó el club”, dice aunque su relato muestra que aún vive en corazones y memorias.