La “Ciudad Luz” será sede de los Juegos Olímpicos por tercera vez en la historia. Unos 10.500 atletas de 32 disciplinas tendrán a los más icónicos puntos de la urbe como el escenario de la gloria deportiva. En el medio de las innovaciones de esta edición, la polémica por la limpieza del Sena tomó las primeras planas.
Exactamente 100 años después de que los Juegos Olímpicos se celebraron por última vez en París, y 128 años después de su resurgimiento moderno en Atenas, los Juegos Olímpicos de 2024 vuelve a la capital francesa con rasgos innovadores para su 33ª edición.
La ceremonia de apertura, que se realizará el viernes 26 de julio a las 14:30 (hora Argentina), se trasladará al Río Sena, donde cada una de las delegaciones navegarán en embarcaciones.
Se recorrerán diferentes sitios de interés como el Notre-Dame, el museo del Louvre Pont des Arts, Pont Neuf, Pont Alexandre III, el Museo de Orsay y finalizaría al frente de la Torre Eiffel, donde se darán una serie de presentaciones artísticas (entre ellas se encuentra la cantante estadounidense Sabrina Carpenter) y culturales.
La ambiciosa idea es trasladar el espectáculo desde un estadio con entradas muy caras, a la ciudad, donde mucha más gente pueda verlo.
Se espera que una multitud de 320.000 personas se agolpe en las orillas del río a lo largo de la ruta de 6 kilómetros desde Pont d’Austerlitz hasta Pont d’Iéna.
Se vendieron casi 11 millones de entradas, por lo que se espera que una gran multitud visite París y puedan disfrutar de unos nuevos Juegos Olímpicos en la ciudad francesa, que se llevarán a cabo hasta el 11 de agosto.
Son 32 las disciplinas que se disputarán en estos Juegos Olímpicos. Habrá 10.500 participantes (mitad son hombres y la otra mitad mujeres), casi 600 deportistas menos que en la edición pasada en Tokio 2020.
La candidatura parisina se dio gracias a un proyecto público-privado, encabezada por el ex piragüista olímpico Tony Estanguet, el cual contaba con una reducida aportación pública y el 85 por ciento de las instalaciones ya construidas.
Un chapuzón en el Sena
El Sena acogerá varias pruebas de natación en aguas abiertas durante los Juegos, incluida la natación maratón en los Juegos Olímpicos y las etapas de natación de los triatlones olímpicos y paralímpicos. Nadar en ese río estuvo prohibido durante más de un siglo.
Para demostrar que el curso de agua es apto y segurio para los atletas, la propia alcaldesa de la capital francesa, Anne Hidalgo, dio el “chapuzón inaugural”.
Hidalgo se sumergió en el río cerca de la catedral de Notre Dame, cumpliendo una promesa de campaña.
Vestida con un traje de neopreno y gafas protectoras, se zambulló junto al jefe de París 2024, Tony Estanguet, y el principal funcionario del gobierno de la región de París, Marc Guillaume, y nadadores de clubes de natación locales.
“El Sena es exquisito”, dijo Hidalgo desde el agua. Después de emerger, continuó elogiando: “El agua es muy, muy buena. Un poco fresca, pero no tan mala”. También dijo que era “un sueño” y un “testimonio de que hemos logrado mucho trabajo”, haciendo referencia al “plan de natación” de la ciudad que se lanzó en 2015.
Desde ese año, los organizadores han invertido 1.500 millones de dólares para preparar el Sena para los Juegos Olímpicos y garantizar que los parisinos tengan un río más limpio después de los Juegos.
El plan incluía la construcción de una gigantesca cuenca subterránea de almacenamiento de agua en el centro de París, la renovación de la infraestructura de alcantarillado y la modernización de las plantas de tratamiento de aguas residuales.
Las preocupaciones sobre el caudal del Sena y los niveles de contaminación persisten, lo que llevó al grupo de monitoreo Eau de Paris a realizar pruebas diarias de calidad del agua.
Los resultados a principios de junio indicaron niveles inseguros de la bacteria Escherichia coli, seguidos de mejoras recientes.
Punto por punto
En Saint Denis, se construyó el estadio olímpico, la villa de los atletas y el centro acuático; también se construyó el Adidas Arena, un pabellón en el centro de París.
Cómo sucedió en otras ciudades que fueron sede, el alojamiento de los deportistas se convertirá en una vivienda social una vez terminen los Juegos Olímpicos.
El voleibol playa se disputará en los Campos de Marte, junto a la Torre Eiffel.
Por otro lado, en la Plaza Concordia se disputarán el baloncesto 3×3 y el “breakdance”. En el complejo arquitectónico Los Inválidos se harán algunas pruebas de atletismo y tiro con arco.
Por otra parte, en la Plaza del Trocadero se llevarán a cabo otras pruebas de atletismo y ciclismo en ruta. En el puente Alexandre III se competirá el triatlón y en el Grand Palais se competirá la esgrima.
En cuanto a las competiciones de hípica, se darán en los jardines del palacio de Versalles y el tenis se disputará en las pistas del Roland Garros. Por último, se encuentra el estadio olímpico de Yves-du-Manoir donde se jugará el hockey sobre césped -es la única estructura que también fue utilizada en los Juegos Olímpicos en 1924-.
Fuera de París se darán las pruebas de velas en las aguas mediterráneas de Marsella y las de surf en Teahupo , precisamente en la isla de Tahití.
Burdeos, Niza, Lyon, Nantes, Saint Etienne y Lille serán las otras subsedes.