El intendente Claudio Larraza volvió a salir a las puertas del municipio para atender el reclamo, en este caso, gremial. No pasó inadvertida la presencia del concejal Sebastián Avila (MID) y hubo un medido contrapunto con el jefe comunal.
"Los contratos están en etapa de evaluación y no hay definiciones al respecto. Estoy absolutamente en contra de los maltratos y las persecuciones, por eso solicité nombres ante los distintos planteos para trabajar de manera interna en busca del consenso", agregó el jefe comunal en un comunicado de prensa.
Respecto al encuentro de mañana, el escrito detalla que "Larraza se mostró optimista y analizó que 'llevamos dos semanas al frente de la ciudad y aún hay mucho por conocer, pero nuestra prioridad es que haya trabajo en condiciones dignas en nuestra ciudad y buscamos la mejor manera para construir juntos'", indica.
Larraza tomó la iniciativa, dio pasos seguros, pero está definiendo el pulso de su gestión que, hasta ahora, fue "dar la cara" y dialogar. Pero también debe definir. Este miércoles tendrá reunión con el gremio y de cómo se resuelva el reclamo dependerá la imagen que le quede a los vecinos, el gremio y a la política en general. Habrá que ver si hay empate, triunfo o derrota.
En los comentarios en redes sociales de este medio, está claro cómo se sigue el tema. Obviamente, el gobierno recién comienza y tiene el crédito abierto, pero la sucesión de fracasos hace que la gente se impaciente.
Incluso, por si el oficialismo no lo notó, a 10 días del inicio de gestión ya tiene un competidor para 2.027: Sebastián Ávila que ya dio dos muestras concretas. Fue y solucionó el problema del estacionamiento en la EPET 10 que los docentes venían reclamando hace tiempo. Y en la misma tarde, fue e instaló dos reflectores Led en el patio del CPEM 85 que se venían reclamando hace años. Hay que señalar que Ávila también hace 18 días que está en gestión.