El fiscal del caso Andrés Azar y la asistente letrada Carolina Gutiérrez formularon cargos a un varón por amenazar y, luego, intentar matar a un vecino del barrio 7 de Mayo de Neuquén con el que había tenido una discusión.
Los hechos, de acuerdo con el relato de ambos representantes del Ministerio Público Fiscal, tuvieron dos momentos: primero, cuando el 4 de febrero, cerca de las 9, imputado, B.E.T, ingresó a la casa de la víctima mientras esta última dormía junto a su pareja, efectuó un disparo y lo amenazo. El segundo se produjo minutos más tarde, cuando el varón agredido fue a la casa del acusado para recriminarle lo que había hecho y la respuesta fue una nueva agresión, con un disparo en el abdomen. La víctima se desplomó en el lugar, mientras que B.E.T se dio a la fuga hacia el sector de las bardas y recién fue detenido dos días después por la policía.
Horas antes de la amenaza, aproximadamente a las 4 de la madrugada, B.E.T habían discutido en la casa de otro vecino, durante una reunión en la que participaron otras personas. Luego de esa discusión, la víctima se retiró hacia su casa, donde fue sorprendida por B.E.T mientras dormía.
Azar y Gutiérrez calificaron los hechos como violación de domicilio, amenaza agravada y homicidio simple agravado por el uso de arma de fuego en grado de tentativa, todo en concurso real y en carácter de autor (artículos 41 bis; 42; 45; 55; 79, 149 bis y 150 del Código Penal).
Tras formular los cargos, el fiscal y la asistente letrada solicitaron a la jueza Carina Álvarez que el acusado permanezca detenido en prisión preventiva, ya que de esperar el juicio en libertad, podría fugarse (estuvo prófugo durante dos días hasta que lo detuvo la policía) o entorpecer la investigación. La magistrada coincidió con la fiscalía, tuvo por formulados los cargos y fijó la prisión preventiva por 4 meses, el mismo plazo de la investigación.