Milei dio pistas sobre el camino hacia el fin del “cepo” cambiario
La estrategia de ajuste del gobierno nacional llegó a las paritarias sindicales y fijó como techo el 1% mensual para 2025.

La decisión generó tensiones en las negociaciones salariales, especialmente en sectores clave como Camioneros y Sanidad. La disparidad en los aumentos ha sido una constante en 2024, con sectores privados mostrando una recuperación más rápida que los públicos.

El Gobierno nacional busca limitar las paritarias a un incremento del 1% mensual, con el objetivo de acompañar la reducción de la inflación proyectada para 2025. Esta decisión ha complicado las negociaciones entre sindicatos y empresas, especialmente para el Sindicato de Camioneros y la Federación de Trabajadores de la Sanidad (FATSA), cuyos acuerdos recientes no han sido homologados.

La política salarial establecida por el Ministerio de Economía busca evitar que los aumentos salariales se trasladen a los precios, generando tensiones en sectores como el comercio, alimentación y construcción.

Negociaciones tensas y acuerdos no homologados

El Sindicato de Camioneros enfrenta trabas en las negociaciones para el trimestre diciembre-febrero, mientras que el aumento del 11,4% acordado por FATSA para octubre-diciembre no recibió la homologación correspondiente. En tanto, otros gremios como Comercio, SMATA y Alimentación han cerrado acuerdos con incrementos variados, reflejando la disparidad del panorama salarial.

Dispersión salarial y desafíos para 2025

La disparidad en los aumentos salariales ha sido una constante en 2024, con sectores como Gastronómicos y Aceiteros logrando mejoras significativas, mientras que otros apenas compensaron la inflación. El investigador Luis Campos destaca que el sector privado ha mostrado una recuperación más rápida que el público, pero advierte sobre la falta de homogeneidad en las pautas salariales. Para 2025, se anticipan desafíos importantes en las negociaciones debido a este escenario macroeconómico particular.