La Embajada de la Federación de Rusia en Argentina emitió un enérgico comunicado desmintiendo las acusaciones de espionaje formuladas por el vocero presidencial Manuel Adorni. Adorni había afirmado que "un grupo de residentes rusos en el país estaría realizando tareas sospechosas en favor de intereses geopolíticos de Rusia", a lo que la Embajada respondió con un rotundo rechazo y la exigencia de una aclaración oficial por parte del Gobierno argentino.
Durante su conferencia de prensa habitual, Adorni identificó a Lev Andriashvili e Irina Yakovenko como los presuntos líderes de estas actividades, mencionando que la SIDE habría detectado campañas de desinformación vinculadas a ellos. Sin embargo, la Embajada rusa negó cualquier vínculo, declarando que ambas personas "no están registradas en la sección consular" de su sede.
Ante lo que consideran una acusación infundada, la representación diplomática envió una Nota Verbal al Ministerio de Relaciones Exteriores para solicitar precisiones sobre el estatus legal de estas personas en Argentina.
"Manía de espionaje" y daño a la relación bilateral
El comunicado, difundido también en redes sociales, lamenta lo que denomina "una nueva oleada de manía de espionaje", la cual, según expresan, es impulsada por sectores que buscan entorpecer el vínculo entre Moscú y Buenos Aires. "Lamentablemente, esta no es la primera vez que se intenta perjudicar las relaciones ruso-argentinas", sentenciaron desde la Embajada.
A pesar de la tensión generada, la representación rusa reafirmó su voluntad de mantener el diálogo y fortalecer los lazos bilaterales. "Reafirmamos nuestro compromiso con la cooperación y el respeto mutuo entre nuestras naciones", concluye el mensaje. La Embajada dejó en claro que esperan una respuesta formal del Gobierno argentino antes de emitir nuevos pronunciamientos sobre el tema.