Una familia vivió un domingo trágico: un chiquito de casi dos años cayó a la pileta hogareña y murió.
El suceso ocurrió en una vivienda de calle Sarmiento casi Velasco de Allen. La familia se había juntado para el almuerzo dominguero y en un momento, el niño fue hasta la pileta y se precipitó al agua.
La familia se dio cuenta algunos minutos después, lo rescató y lo trasladó de urgencia al hospital local donde los médicos realizaron maniobras de reanimación, aunque fueron infructuosas.
El Ministerio Público Fiscal confirmó el deceso de la criatura y el inicio de la investigación por lo sucedido. La novedad provocó una ola de dolor en la ciudad.