En el Día Mundial de la Tuberculosis se recuerda que su diagnóstico es fundamental para iniciar el tratamiento, controlar la enfermedad y lograr su cura. Se previene con la vacuna BCG.
La tuberculosis (TBC) es una enfermedad contagiosa prevenible y curable, que afecta principalmente a los pulmones, y que cada 24 de marzo se conmemora mundialmente para concientizar sobre sus consecuencias. Los equipos de salud neuquinos se capacitan y actualizan constantemente en relación al diagnóstico y tratamiento oportuno. Además, en concordancia con las líneas de cuidado del Plan Provincial de Salud, se refuerza la accesibilidad a los estudios para prevenir su propagación y llevar adelante el seguimiento de las personas en tratamiento y el estudio de sus contactos.
La tuberculosis se transmite por el aire, a través de las gotas que elimina al toser o estornudar una persona con la enfermedad que no está en tratamiento. Para que se produzca el contagio, el contacto con la persona con tuberculosis debe ser cercano y diario.
Durante marzo, referentes provinciales de tuberculosis del ministerio de Salud junto con el equipo de Epidemiología de la Región Confluencia comenzaron a desarrollar un curso de actualización sobre su tratamiento. Estos espacios permiten compartir experiencias y fortalecer las líneas y redes de atención, ya que todos los establecimientos de salud tienen capacidad de respuesta ante la sospecha o notificación de un caso de tuberculosis.
En la Región Confluencia se llevaron a cabo dos encuentros destinados a profesionales médicos/as en el Hospital Bouquet Roldán y en el Centro de Salud San Lorenzo Norte, en la ciudad de Neuquén. De acuerdo a las estadísticas, durante 2023 se diagnosticaron 51 pacientes y en 2024 se registraron 74 casos con una tasa de 10.9 por 100.000 habitantes. Este incremento se dio en concordancia con toda la Argentina, aumentando un 20 % los casos de la enfermedad.
En cuanto al tratamiento, es importante destacar que el mismo es gratuito en su totalidad, tanto para personas adultas como pediátricas, y es provisto por Nación.
Prevención
Para evitar las formas graves de la enfermedad es fundamental un diagnóstico precoz y la aplicación de la vacuna BCG a las y los recién nacidos antes de egresar de la institución sanitaria donde nacieron.
Es importante realizar una consulta con los equipos de salud ante los siguientes signos de alarma: tos persistente (con o sin flema) por más de 14 días; fiebre y transpiración durante la noche; eliminación de sangre en el catarro; falta de apetito; cansancio y pérdida de peso.
Cuando una persona concurre al hospital o centro de salud a consultar, se le realiza el diagnóstico, se toma una muestra y se efectúa un primer análisis para detectar la enfermedad, y luego se deriva la muestra para cultivo a los laboratorios de Zapala, Junín de los Andes o la Ciudad de Neuquén (Hospital Castro Rendón o Heller). Una vez que están los resultados se evalúa el tratamiento y el seguimiento adecuado y supervisado. Si se requiere un método rápido de diagnóstico se deriva al Malbrán en Buenos Aires.