Marité Berbel, Traful, familiares y amigos están en el Paseo La Pasto Verde de Plaza Huincul, donde van a pasar la tarde, contó. “Nos reunimos para venir hacerle una visita a la Pasto Verde, por hablar de esto, de la letra que dice que le duele que digan que el Criollo Neuquino se olvidó, para que doña Carmen no piense que la olvidamos sino al contrario, que está siempre muy presente”, dijo.
Luego sostuvo que hay que “Hacer visualizar este lugar, que es un monumento histórico, siempre digo que los argentinos, los neuquinos somos medios tontos en eso, uno va a otros países y hay una piedra donde alguien se subía y ya lo hacen monumentos históricos y hacen paseo a ese lugar… que la gente la visite a la Pasto Verde, es un pedazo de la historia de Neuquén y la historia del país, no nos olvidemos que ella peleó la guerra del Paraguay, era una fontinera reconocida que vino a dejar sus huesos, su historia acá”.
Más adelante recordó “Esa reja que tiene la hizo mi abuelo Juan Berbel y hay un diario que dice que la hicieron mi dos abuelos, pero ahí no la puedo asegurar, mi papá nació en el Pozo Uno y con sus hermanos el paseo era venir a ver a la Pasto Verde”.
“Mis abuelos maternos, se casaron en Cipolletti, iban para las Lajas, mi abuelo era maestro, la primer noche de bodas la pasaron acá, en la posada de la Pasto Verde, los atendió ella, a la mañana cuando se levantan y los caballos no estaban, mi abuelo salió a buscar a los caballos y tardó tres días en volver, asi que mi abuelita sola quedó con la Pasto Verde”, rememoró.